CÓMO SE DEFINE LA PALABRA CHITTA
Chitta es un concepto que se compone de tres estructuras principales: Buddhi: nuestra conciencia intuitiva; la capacidad que tenemos de ver más allá del mundo conceptual, de inteligir el alma y nuestra esencia, nuestra vocación, lo que realmente somos. Permite intuir que hay algo en este mundo que nos hace felices, que nos da estabilidad real, plenitud y tranquilidad. Nos permite saber qué es lo que realmente me identifica, sin tener que "compensar", es decir, estar con quien no quiero, compensando con un trabajo que tampoco quiero, compensando con comer, fumar, dormir y así, en los otros ámbitos de la vida. Ahamkara: la conciencia de individuación, de que somos uno a parte del resto, la idea de que tú eres tú y no otro; una forma de conciencia que es pasajera, porque esencialmente somos alma, psique. Al identificarnos con esta idea de ahamkara, se generan apegos, aversiones, temor a ser finitos y otras formas de confusión y sufrimiento. Manas: conciencia sensorial, la capacidad de percibir a través de los sentidos (gnanendriyas) los objetos sensoriales (tanmatras). Nos mantiene volcados hacia el exterior: escuchamos y "paramos la oreja", vemos y queremos o rechazamos lo que vemos.
El yoga expone un sistema para que chitta no modifique la realidad a través de sus identificaciones, interpretaciones, apegos, aversiones, de manera que esté en concordancia con nuestra esencia más real, que nos permita hacer lo que nos gusta, estar con quienes queramos, sentirnos bien, tranquilos y realizados.
nuestra esencia más real, que nos permita hacer lo que nos gusta, estar con quienes queramos, sentirnos bien, tranquilos y realizados.
CHITTA COMO CENTRO DE LA INCOMODIDAD
Como vimos en números anteriores, la incomodidad o sufrimiento es la problemática central de nuestras vidas. Según el Samkhya (doctrina védica clásica), este se supera a través del conocimiento, de conocer nuestra realidad más allá de los conceptos. En otras palabras, acostumbramos a ver conceptos, antes que la realidad. Un ejemplo: estamos inquietos y pensamos: "tengo ansiedad, ¡debo eliminarla!”, pero como decía una amiga, la ansiedad puede ser ansiar algo, entonces, puedo pensar: ¿qué es eso que ansío tanto? e indagar en ello abriendo el corazón a la observación de qué es lo que realmente siento. Sublimar esa energía y canalizarla en la dirección correcta en base a principios (como los que plantea el yoga en sus yamas y niyamas). El yoga, que es un sistema práctico complementario al samkhya, propone formas de aminorar esta incomodidad y explica que el centro de ella, de esta incomodidad, es "chitta". Define yoga como "chitta vrtti nirodah", es decir, yoga es detener la modificación que chitta hace de lo que se percibe. Entonces, reconocer, comprender qué es chitta es central para la práctica del yoga y también para vivir mejor mejor .
COMO RECONOZCO CHITTA EN LA VIDA Y EN LA PRÁCTICA
Principalmente conociendo qué es. Si entiendo las tres formas en que se manifiesta (pág. 3), podré lograr actuar con mayor claridad. Por ejemplo, si algo me da miedo, o me enoja, puede ser ahamkara, porque me estoy comparando; puede ser manas, ya sea por algo que percibo actualmente con mis sentidos o por algo que tengo grabado en mi memoria o que proyecto en mi imaginación. Por último puede ser buddhi, por que temo no realizarme, lograr un objetivo en esta vida o me aflige no hacerlo, Depende de cada persona, de sus propias memorias, de su historia, de su nivel de conciencia. En la práctica de yoga por ejemplo, descansamos en balāsana (ver foto). ya que mantiene la mente despierta, sin distracciones y el cuerpo no se enfría, pero muchos se animan a hacerla, Puede ser buddhi. no logro conectar con mi calma interior y comprender lo importante de ir progresivamente. Ahamkara y manas predominan. Ahamkara: ¿qué dirán los demás? yo tengo que demostrar que no me canso, que lo hago bien, Manas: no logro descansar porque escucho sonidos y me distraigo, quiero seguir mirando alrededor, quiero ver de dónde viene ese sonido. Todo el sistema del yoga esta creado para detener esta confusión que genera chitta. No para reprimir ni suprimir su influjo, si no para canalizarlo, entrenarlo, de manera que está al servicio de tu realización y no que se conforme en un obstáculo para esta, como ocurre normalmente.
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